Asistí al primer concierto y fue maravilloso. Un espacio donde se creó algo mágico a través de la música, las palabras, del fluir tan hipnotizante de las manos de Ricardo, del clima tan cálido que se formó por las personas que asistimos, por el lugar tan acogedor donde se realizó... Más que un concierto, lo sentí como un regalo hacia mi interior. Gracias Ricardo por compartir tanta belleza con los demás. Tienes un gran don y sabes cómo hacer un buen uso de él. Gracias Rocío por tu dulzura, tu humildad, tu saber estar, tu corazón tan hermoso. Nos veremos en más ocasiones.
Mari